Había una vez un cuentista que se sorprendió, todavía tenía esa capacidad, por el hatajo de políticos que, ante la situación por la que estaba atravesando el mundo y, sobre todo, su país, discutían mucho la política económica que manejaban sus adversarios, es decir, los que estaban en el poder. Amargaban al personal con continuas apariciones en el parlamento y en los medios de comunicación diciendo que la "cosa" iba mal, mal, mal.... Es cierto que va mal, pensó el cuentista, por supuesto. Pero no sabía por qué estas apariciones y otras tantas estaban marcadas por el reflejo de una sonrisa en las caras de quienes comunicaban... Muchas risas y sonrisas vemos últimamente. ¿Es que la situación está para sonrisas y risas?¡ Hatajo de sinvergüenzas!, se dijo el cuentista durante todo el santo día en el que se sorprendió.
355. MADRE DE LOS RÍOS
Hace 8 años
Sonrisas y lágrimas, diría yo. Lágrimas para lod de a pie, como siempre.
ResponderEliminarSí que sonríen felices sobretodo los políticos que están en la oposición. Sus anhelos más fervientes son que las cosas vayan mal; piensan que están sumando puntos para las próximas elecciones. Claro, ellos no tienen problemas para llegar a fin de mes.
ResponderEliminarPobre "cuentista", quizás tenga que sorprenderse aún más.... y los banqueros dándose el banquete
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